Texas es el primer estado de EEUU que respalda el veto inmigratorio de Trump

El fiscal general de Texas, Ken Paxton, apoyó hoy al polémico decreto firmado por el presidente Donald Trump que vetó la entrada a Estados Unidos a refugiados y ciudadanos de siete países de mayoría musulmana, convirtiéndose en el primer estado que defiende públicamente la restricción de viajes del mandatario y cuya aplicación está suspendida por la justicia.
"La ley deja muy claro que el presidente tiene autoridad para proteger la seguridad del pueblo estadounidense y las instituciones de nuestra nación con respecto a quién puede entrar en este país", manifestó en un comunicado Paxton, cuyo estado está gobernado por el republicano Greg Abbott, informó la agencia de noticias EFE.

Este decreto, ahora bloqueado por un fallo firme de una corte de apelaciones federal, ordenaba suspender durante 120 días el programa de recepción de refugiados de Estados Unidos -indefinidamente para los sirios- y frenaba durante 90 días la emisión de visados para ciudadanos de siete países de mayoría musulmana: Libia, Sudán, Somalia, Siria, Iraq, Irán y Yemen.

La medida provocó una ola de repudio y protestas, dentro y fuera del país, y desató la primera gran pulseada entre el gobierno de Trump y el Poder Judicial.

Varios estados presentaron recursos de inconstitucionalidad contra el decreto y, una corte federal de apelaciones de San Francisco decidió mantener la suspensión de la medida. Esto desató la ira Trump, quien acusó a los jueces de tomar una decisión política y prometió dar pelea legal.

En su escrito, Paxton sostuvo hoy que la orden del presidente republicano es "un ejercicio legal del Poder Ejecutivo delegado por el Congreso sobre asuntos exteriores y seguridad nacional", por lo que reclamó margen de decisión para el mandatario.

Se trata de la primera vez que un estado defiende abiertamente el decreto inmigratorio de Trump, una medida que cosechó críticas inclusive dentro de las filas republicanas.

Las opciones del gobierno de Trump ahora son apelar ante la Corte Suprema, pedir una revisión del fallo de la corte de apelaciones con un número más amplio de jueces o, finalmente, como ya adelantó el propio mandatario, escribir un "decreto totalmente nuevo".

Mientras tanto, muchos refugiados y extranjeros que habían sido rechazados en aeropuertos estadounidenses durante los días que el decreto estuvo vigente, están logrando ingresar a Estados Unidos con los visados que ya habían conseguido antes de la medida de Trump.

back to top