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Análisis del marciano sobre la economía argentina en 2014

Sigo aquí. Soy el Extraterrestre Economista que lanza ahora su segundo artículo. Para sorpresa de algunos, sigo aquí. Un poco por el entusiasmo que me inunda en mi afán por conocer más acerca de ésta tan apasionante especie y otro poco por el éxito de mi anterior artículo al que denominé “Un Marciano opina acerca de los linchamientos”, cuya publicación ya obtuvo numerosos “Me Gusta”, y cuya lectura recomiendo a quienes no tuvieron la suerte de leerlo hasta el momento, a través del enlace siguiente:

https://pisotrecemagazine.wordpress.com/2014/05/16/un-marciano-opina-acerca-de-los-linchamientos-por-julian-denaro/

Sigo aquí. Y además aprovecharé para ver el mundial. Me siento muy bien en Argentina, país al que he venido especialmente. El otro día me conmovieron “Las Leonas” en el mundial de hockey femenino, llevándose por delante al equipo británico sobre el final del partido. Pero más que nada me dispondré a ver a uno de los dos mejores jugadores de la historia, Lionel Messi, que también es argentino, al igual que Diego Maradona. Dicho sea de paso, a mí me gustó particularmente escuchar el relato de Victor Hugo Morales en el segundo gol de Argentina a los ingleses el 22 de junio de 1986, que será por siempre el mejor gol de la historia de los mundiales, cuando dice refiriéndose a D10s “…barrilete cósmico, de qué planeta viniste?...”

Sigo aquí, y contribuiré con éste trabajo a la revolución cultural que propongo, a la toma de conciencia que sugiero, tal como concluyo mi artículo anterior: “es imperantemente urgente que se estimule el pensamiento, el estudio y la toma de conciencia por parte de los pueblos, para no quedar tan cautivos de los dueños de los medios de comunicación, de los que manejan el poder, y de los formadores de opinión en general. Es una lucha cultural la que debe realizar la especie humana para construir una conciencia que consolide los valores que se necesitan como pueblo en vísperas de una mejora en términos de equidad y de una más participativa actividad ciudadana. Esta sugerencia de mi parte, haría que el poder no esté tan concentrado y entonces, precisamente por la desconcentración del poder, se produzca un efecto de enriquecimiento tanto para la conciencia en cuanto a valores como para la actividad del pensamiento en general. La comprensión de la realidad ya no sería de éste modo tan inducida por grupos selectos sino que sería consecuencia de una más activa participación de todos los que comparten la sociedad.”

Para éste cometido, transitaré por una más amplia discusión, que aborda diversos temas que están sobre la mesa de todos los argentinos todos los días. Analizaremos términos de conflicto como Devaluación, Inflación, Ajuste, Precios Cuidados, Impuesto a las Ganancias, Club de París y BRICS. Pero para poder efectuarlo con la mayor seriedad posible, no estoy sólo en éste cometido. Se ha utilizado la brecha espacio – temporal para abducir a tres de los más grandes genios de todos los tiempos: Karl Marx (1818 – 1883), Friedrich Nietzche (1844 – 1900) y Sigmund Freud (1856 – 1939). Ya los tengo aquí conmigo. Les hemos incorporado a sus cerebros información suficiente de los últimos cien años como para poder utilizar tanto sus extraordinarios talentos como sus peculiares personalidades en las discusiones que de ésta manera serán enriquecidas hasta un nivel insuperable.

Los tengo aquí dormidos. Al despertarlos habré de explicarles que están siendo utilizados para una investigación trascendental para la cultura del universo, y que luego serán devueltos a los años 1880 Marx, 1890 Nietzche y 1939 Freud, para no recordar absolutamente nada de todo esto. Pues bien, la investigación será transcripta automáticamente desde el momento en que los despierto por el sistema tecnológico de que aquí dispongo, y será publicada bajo el título “Análisis sobre la Política Económica Argentina en 2014”. Aquí vamos:

Yo (Y): Hola mis amigos, no se preocupen, (les hablo rápido porque estoy nervioso) estarán un ratito en ésta nave conmigo para que conversemos unos asuntos y luego volverán adonde estaban y no recordarán absolutamente nada de esto. Lo único que puedo decirles es que les agradezco porque el aporte que pueden hacer ustedes para la cultura universal es inmenso, es literalmente Monumental. De nuestra charla – debate saldrá publicado un artículo que ayudará a la especie humana en general y a los argentinos en particular a comprender mejor. Es crucial en la revolución cultural que está en marcha. Es un momento muy especial y definitorio, por eso insisto que son necesarios vuestros talentos y sabiduría para contribuir a la causa!

Nietzche (N): je, buenísimo… yo estoy más allá del bien y del mal… jaja

Marx (M): bueno, yo espero que algún día las luchas de clases sean un problema del pasado, aunque para resolverlo deberían entenderme y hacerme caso de una buena vez!

Freud (F): sin dudas mis amigos que esto es algo estructuralmente constitutivo de la especie humana, de modo que podemos avanzar, pero es un recorrido muy lento, vean que pasó apenas un siglo desde que nosotros tres coexistimos, pero comparto la moción para aportar a tu investigación amigo… del universo…

Y: Estimados genios de la especie, tan genios que siguen siendo estudiados de manera bastante intensa, tendrán que exponerme sus puntos de vista acerca de una amplia gama de conceptos. Supongamos que somos argentinos y queremos darle un mensaje explicativo al pueblo argentino, ya que Argentina es uno de los centros donde más activa está la Revolución Cultural en el mundo hacia el año 2014. Empecemos por el primero de los términos: Devaluación.

M: Permítanme comenzar a mí que soy economista… Bien, gracias (los otros dos genios asintieron con la cabeza). Primero me gustaría exponer una serie de definiciones sin las cuales no se puede pensar en términos económicos. Véase: Yo siempre sostuve que la determinación de la magnitud de valor por el tiempo de trabajo es el secreto que se esconde detrás de las oscilaciones aparentes de los valores relativos de las mercancías. Pero al mismo tiempo, continuamente, he insistido en resaltar que parte del trabajo efectuado por un proletario, es apropiado por el dueño de los medios de producción, que es el capital que contrata a los trabajadores. Por cierto entonces, vemos que existe una puja, una disputa en cuanto a la distribución de la riqueza producida.

Es como decía Adam Smith en su obra de 1776 “Investigación sobre la Naturaleza y las Causas de la Riqueza de las Naciones”, en la que destaca que parte del producto del trabajo paga el salario de los propios obreros, y otra parte del mismo paga las ganancias del capital que lo emplea. Aquí, yo veo, existe un plus de valor. Un valor adicional que se queda uno y no el otro. Se lo queda el que más poder tiene, lo que vale decir, los dueños de los medios de producción, el capital. Al tiempo que los trabajadores siempre quedan así sometidos a expensas de la voluntad del capital. Por todo esto y para acercarme al concepto aquí gatillado, vemos que la modificación de los valores relativos de las mercancías siempre es manejado por los sectores de poder. Y sí, es como afirma alguien que sería un gran discípulo mío hacia la centuria siguiente. Julián Denaro escribió en el año 2013 en una obra titulada “Economía Política con Justicia Social”, que si no se interviniera, si no se regulara sobre el conjunto total de hechos económicos y características sociales que atraviesan la vida y la política de un país, veríamos que los herederos del poder económico, y por tanto político, actuarían sucesivamente en pos de conservarlo. La lógica consecuencia de fuerzas desiguales disputando la riqueza, ocasionaría un ensanchamiento de la brecha de desigualdad incrementando la pobreza. De alguna manera, está en línea con lo que plantea Juan Domingo Perón, que afirma en 1969 que la economía libre no existía ni había existido nunca, que la economía es siempre dirigida: o la dirige el Estado para lograr la grandeza de una Nación y el bienestar general y la felicidad de los pueblos, o la dirigen las grandes compañías multinacionales financieras para conseguir la destrucción de las Naciones y la esclavitud y desdicha de sus habitantes. Fíjense que es exactamente lo que yo sugerí en todas mis obras, especialmente en el “Manifiesto Comunista” de 1848 y en “El Capital” de 1864, que de algún modo tenía que cambiarse ése abuso de poder de ciertas clases sociales, que eran los dueños de los medios de producción y que yo denuncié que partían de una “Acumulación Originaria de Capital”. Lo que vale decir, que su condición no fue producto de su propio trabajo o mérito sino que fue mayoritariamente producto de la herencia del poder.

Ahora que presenté el escenario expongo la situación argentina según mi comprensión, para que luego abramos el juego desde otras perspectivas aportadas por la visión de ustedes.

La Devaluación es un término que se utiliza para remitir a un proceso en el que la moneda legal de nuestra Nación pierde valor o, dicho de una manera más sencilla y actual, cuando el peso argentino pierde valor respecto del dólar, cuestión que trae repercusiones sobre la economía real, por supuesto.

Al encarecerse el dólar, se necesita una mayor cantidad de pesos para comprar cada dólar norteamericano. Por lo cual, con la misma cantidad de trabajo argentino se puede comprar una menor cantidad de dólares. Ahora, claro, si somos argentinos y trabajamos en Argentina, viajamos por la incomparablemente hermosa Argentina y por otros países de la tan rica Latinoamerica, considerando su variedad cultural y paisajística, o incluso si viajáramos a Europa, África y Asia, entonces por qué nos habría de preocupar tanto el dólar y por qué repercute tanto en nuestra economía real?

Si el dólar en un momento dado se vuelve más caro, entonces es más caro importar, es más caro para los argentinos viajar a otros países que conservan la misma paridad cambiaria, y al mismo tiempo se hace más barato para el resto del mundo venir de turismo a la Argentina y comprar los productos elaborados dentro de nuestro país con mano de obra argentina. Pero todo esto es demasiado complejo como para no abordar cada uno de éstos puntos con sus implicancias. Pongamos el ojo en los últimos dos ciclos históricos del país, que son la Convertibilidad (1991 – 2001) y el Kirchnerismo (2003 en adelante):

Durante 10 años, desde 1991 hasta enero del 2002, el dólar siempre valió un peso, de manera constante e invariable. Pero el abaratamiento de las importaciones en conjunto con la ausencia de la participación del Estado para dirigir el rumbo económico del país, destruyó la industria argentina que no podía competir con los productos baratos que provenían del exterior, en lo que se denominó “apertura abrupta e indiscriminada a las importaciones”.

Con esto, se desprende que la devaluación de enero del 2002 fue un alivio para la industria argentina, ya que las importaciones comenzaron a ser más caras y entonces los productos elaborados en el país recobraron competitividad, lo que marcó un punto de renacimiento de nuestro país, que tenía en diciembre del 2001 una pobreza superior al 50% de la población y una tasa de desempleo cercana al 30% con una informalidad laboral de más del 50% (trabajo en negro). Y aquí vuelvo a destacar el acierto de mi obra cuando sugerí que habría ciertas clases sociales que se beneficiarían infinitamente a expensas de las mayorías sometidas.

A partir del 25 de mayo de 2003, con la presidencia de Néstor Kirchner, y a partir del renacimiento en la industria liviana que recupera competitividad, se recupera el nivel de empleo, pero el Presidente incorpora a sus Políticas de Estado elementos revolucionarios luego de tantas décadas de conservadurismo instalado, en donde se estaba sumergido en una crisis en la que además, agobiaba el terrible peso de la Deuda Externa, que como era cerca del 160% del Producto Anual, entonces cerca del 25% del Presupuesto de Gasto del Estado Nacional estaba destinado al pago de Deuda. Como resultado, poco quedaba para distribuir en pago de salarios, jubilaciones, e inversión y desarrollo para la industria, para la salud y para la educación. En fin, una pobreza creciente que parecía no tener fin.

La vuelta a la participación del Estado en la Economía incluye demasiados puntos como para resumirlos brevemente, pero ésta explicación dará cuenta del cambio radical que hubo desde un escenario de pobreza extrema en el 2001 a otro escenario de prosperidad en el 2014. Por el lado del dólar, el Gobierno Kircherista adoptó la modalidad de “Tipo de Cambio Administrado”, que significó manejar constantemente el tipo de cambio que mejor se adecuaba a las necesidades de cada momento, pero ahora complementado con una regulación al comercio exterior. Por un lado, Aranceles a las Importaciones en aquellos rubros en que la industria se halla desprotegida frente a importaciones baratas, haciendo que todos los años haya Superávit Comercial, que es que las Exportaciones sean mayores a las Importaciones, generando un ingreso neto de dinero al país, y por el otro Retenciones a las Exportaciones, que sirven para controlar precios internos y para que el Estado recaude parte de las ganancias extraordinarias provenientes de las exportaciones de alimentos y materias primas que no son otra cosa que producto de la extraordinaria riqueza de la Tierra de Nuestro País y que corresponde que sean distribuidas entre todo el pueblo argentino.

La Nacionalización del Sistema Previsional que se había privatizado durante la década de 1990 también incrementó los fondos del Estado y las Nacionalizaciones de Aerolíneas Argentinas, YPF (empresa hidrocarburífera argentina), Aysa (la más grande empresa nacional potabilizadora de agua) y otras contribuyeron a disminuir el retiro de Ganancias por parte de empresas extranjeras operando en nuestro país. Parte de todo éste dinero superavitario fue destinado a desendeudar al país. Se pagó el total de deuda al FMI y con otros pagos más se disminuyó la deuda externa desde el 160% del Producto Anual a menos del 35%. Consecuencia, lo que era cerca del 25% del Presupuesto de Gasto Público destinado al Pago de Deuda, bajó al 9%, incrementando con ello políticas activas de crecimiento y de distribución de ingresos. La pobreza y el desempleo bajaron a menos del 10%, la industria no tiene más capacidad ociosa sino que está en pleno desarrollo y la clase trabajadora argentina accede como nunca antes a viajes de turismo y a automóviles de nuevos modelos de un modo no conocido anteriormente en la historia del país. Y acá voy a destacar el momento donde mejor me escucharon primero Perón y luego Kirchner. La Ley de Convenios Colectivos de Trabajo que regula todos los años el poder adquisitivo de la clase trabajadora, fue creada por Perón en Argentina y recuperada por Kirchner, luego de haber sido destruida por el nefasto ciclo menemista. Esta, también llamada Ley de Paritarias, consiste en el acuerdo entre los sindicatos, que tienen el espíritu de defender los derechos de la clase trabajadora, cosa que yo les enseñé con mi obra, las patronales que defienden los intereses empresariales del capital y el Estado que asiste como mediador, para darle fuerza de Ley al acuerdo. En éste sentido, déjenme sentir orgulloso de que el Kirchnerismo es bien Marxista!!!!

Pues bien, como de ésta demasiado breve descripción se puede deducir, todos los sectores de la población argentina se vieron favorecidos con el ciclo kirchnerista. Sin embargo, tan inexplicable como las guerras o como las invasiones norteamericanas a numerosos países con el saldo de tantos muertos, ciertos sectores de poder concentrado están disgustados con éste modelo de país que tanta riqueza les hizo ganar. Los herederos del poder económico, y por tanto político de nuestro país, ven con mucho disgusto la idea de compartir incluso una pequeña parte de su riqueza con el pueblo argentino. Ésos poderes están enlazados con el Imperialismo Norteamericano, el Poder Financiero y los Medios de Comunicación. En suma, pusieron toda su artillería para derrocar al gobierno kirchnerista. Generaron a través de los medios de comunicación la idea de que se venía otro “corralito” (que fue la caída de la convertibilidad allá por el 2001), que se vendría una fuerte devaluación, etcétera. La tasa de crecimiento del país sufrió un impacto por la contracción de la inversión en algunos sectores, pero lo que fundamentalmente provocaron fue el temor que provocó una masiva fuga desde el peso hacia el dólar. Con esto, generaron un mercado ilegal para manejar la compra – venta de dólares a un precio superior al establecido por el gobierno en su política de “Tipo de Cambio Administrado”. Pero no lograron meterle una bofetada al gobierno, hasta que por fin decidieron un golpe económico. Los grandes exportadores dejaron de liquidar exportaciones y dejaron de exportar a condición de que el gobierno devalúe. Quieren volver a tener el poder que perdieron desde que Néstor Kirchner asumió la presidencia el 25 de mayo del 2003. Debo aclarar aquí que los exportadores no son los productores. Los exportadores son los que acopian la producción de los pequeños productores y la comercializan una parte al mercado interno (dentro del país) y el resto lo exportan. Éstos grandes acopiadores, que son empresas multinacionales, en realidad, someten a los pequeños productores a asegurarles la compra del total de la producción pero imponiéndoles un precio más bajo, empobreciéndolos. Aclaro esto para que sepamos quién es quién.

Continúo. Pero además, si se produce una devaluación, los únicos que se benefician son los que tienen dólares, ya que con cada billete de 100 dólares pueden comprar más que antes, al tiempo que se perjudican los que no tienen dólares, y todo el país. Si se devalúa en el 2014, en pleno proceso de Industrialización Sustitutiva de Importaciones, se encarece el costo de la Tecnología y los Insumos Importados, y eso pone un freno al proceso industrializador, al mismo momento que eleva los niveles generales de precios, dada la dependencia de la Economía Argentina con la compra de Insumos, Maquinas y Bienes Finales del Extranjero.

Además, para pagar el costo anual de capital e intereses de deuda externa, una devaluación hace que se necesiten más pesos, que el Presupuesto de Gasto del Estado Nacional tiene pensado para otros objetivos.

Véase que siendo 7.000 millones de dólares los asignados a pago de deuda, a 6 pesos son 42.000 millones de pesos, pero a 8 pesos se vuelven 56.000 millones de pesos. Con lo cual, el Estado necesita 14.000 millones de pesos más para el pago de deuda, y entonces tiene 14.000 millones de pesos menos para asignar a Servicios Sociales y Servicios Económicos. Ah, claro, pero los dueños de los dólares se enriquecen. O sea, los Exportadores que se enriquecieron tanto durante el gobierno Kirchnerista, ahora quieren embromar al mismo gobierno que los favoreció y también al pueblo.

Y así fue. En enero del 2014, los exportadores se hicieron dueños del país y no cedieron a exportar hasta que el gobierno eleve el tipo de cambio oficial. Luego del objetivo cumplido, se pudieron ingresar al país cerca de 10.000 millones de dólares, que constituyeron para el Estado un ingreso en concepto de Derechos de Exportación (Retenciones a las Exportaciones) de más de 25.000 millones de pesos.

Como se puede apreciar, el Poder del Estado es a veces insuficiente para enfrentarse con el Poder Fáctico, el Verdadero Poder del País, al que tan poco le importa la gente y tan poco le preocupa mentirle a través de los medios de comunicación que manejan.

Por todo esto, es tan importante que durante el presente año 2014, por cuestiones que aclararé más tarde, el Gobierno Nacional haya recuperado el poder para estabilizar el precio del dólar y así volver a manejar desde el Estado la Política Cambiaria, impidiéndole al Poder Fáctico volver a enriquecerse a costa del pueblo.

F: Interrumpo para decir que experimentamos así la impresión de que la civilización, es algo que fue impuesto a una mayoría, contraria a ella, por una minoría que supo apoderarse de los medios de poder y de coerción. Es increíble cómo funcionan las pulsiones. Fíjense que yo en mi obra “El Porvenir de una Ilusión” de 1927, afirmo que el dominio de la masa por una minoría, seguirá demostrándose siempre, tan imprescindible como la imposición coercitiva de la labor cultural. Pues las masas son perezosas e ignorantes, y no admiten gustosas la renuncia al instinto, siendo útiles cuantos argumentos se aduzcan para convencerlas de lo inevitable de tal renuncia, y sus individuos se apoyan unos a otros en la tolerancia de su desenfreno. Únicamente la influencia de individuos ejemplares como usted Marx, a los que reconocen como conductores, puede moverlas a aceptar aquellos esfuerzos y privaciones imprescindibles para la perduración de la cultura. Todo irá entonces bien mientras que tales conductores sean personas que posean un profundo conocimiento de las necesidades de la vida y que se hayan elevado hasta el dominio de sus propios deseos instintivos. Por eso es tan importante defender a un gobierno que tanto ha hecho y hace por el pueblo argentino, aún enfrentándose al terrible poder económico y financiero que maneja los medios de comunicación, a través del que instala tan fácilmente un sentido común en la población.

N: Es verdad! Los que manejan los medios de comunicación, los que tienen el poder, la aristocracia, viven diciendo que ellos no sólo son los mejores, sino que también “les va mejor”, o, en todo caso, alguna vez les irá mejor. Y proponen terminar con las viejas políticas y dicen que pertenecen a una nueva política, autodenominándose “a-políticos”. Basta! Basta! Ya no lo soporto más! Aire viciado! Aire viciado! Ese taller donde se fabrican ideales, me parece que apesta a mentiras!!!!!!!!!

Éstos herederos del poder, que no quieren compartir ni un centavo de su riqueza con el pueblo, son los nobles, los poderosos, los hombres de posición superior y elevados sentimientos, quienes se sintieron y se valoraron a sí mismos y a su obrar como buenos, o sea como algo de primer rango, en contraposición a todo lo bajo, abyecto, vulgar y plebeyo. Así, la palabra distintiva de la aristocracia, que acaba significando el bueno, el noble, el puro, significaba en su origen el cabeza rubia, en contraposición a los habitantes primitivos, de piel morena y cabellos negros. Y se rehúsan a los subsidios que el Estado otorga a los más postergados que caerían inmediatamente en la indigencia de no ser por esos subsidios, y que contraería el consumo y por tanto el nivel de actividad y empleo de la economía, produciendo a su vez más pobreza en una espiral descendente y destructiva. Pero no les importa! Y a través de los medios dicen que los subsidios a la pobreza son darles de comer a los vagos pero por el otro lado dicen que continuarían las políticas distributivas implantadas por el kirchnerismo. Basta de mentir! Marx, Freud y usted Marciano ayudemos a la revolución cultural! No permitamos que tan fácilmente la gente acepte las mentiras! Ayudemos! Basta! Veamos que el noble, el poder, que utiliza los medios de comunicación para mentirle al pueblo, concibe el concepto fundamental <bueno> de un modo previo y espontáneo, es decir, lo concibe a base de sí mismo, y sólo a partir de él se forma una idea de <malo>. No podemos permitir más esto mis amigos! Basta!

Y: Me cuesta aceptar que semejante cosa le suceda a millones de humanos y que no se dieran cuenta!

Vamos bien queridos amigos! Sigamos con otro concepto: Inflación

M: Me alegro que vayamos bien. Repitamos la fórmula entonces y yo explico la Inflación.

Bueno, a partir de enero del 2014, apenas se produjo un alza en el precio del dólar, advino una terrible suba en los precios de todos los bienes de la economía.

Por un lado, la suba del costo de ciertos insumos importados encarecen los costos de producción de los bienes finales que requieren de bienes intermedios del exterior, al tiempo que también se produce un encarecimiento de bienes finales importados. Las expectativas asociadas a ésta reacomodación de precios son traccionadas por la puja distributiva, lo que vale decir que, al momento de incrementar los precios, los empresarios aprovechan para intentar apropiarse de un porcentaje un poco mayor respecto al que tenían antes.

Se trata del mismo mecanismo que hemos explicado David Ricardo y yo en el siglo XXI. David lo describió muy bien con un ejemplo en su obra “Principios de Economía Política y Tributación” de 1817. Se parte de un incremento en la productividad generado por un avance en las técnicas de producción, en la que la producción se duplica, o sea, incrementando los ingresos por ventas un 100%. Pero si los salarios solo suben un 50%, las rentas sólo un 75% y el resto es apropiado por el capital, entonces en esa situación los trabajadores son relativamente más pobres. Por tanto, la actividad más importante del Estado tiene que ser intervenir sobre las reglas que determinan la distribución de la riqueza, para conducir a la sociedad a una distribución más equitativa. A lo que yo le agrego unos años más tarde que ésa conducta de acumulación infinita no tiene fin, ya que es la lógica del sistema capitalista de producción. Hoy aclararía agregando que sería la lógica del sistema capitalista de producción dejado en libertad, sin la intervención del Estado. Por eso, debo reconocer que David acertó al decir eso, y que Perón y Néstor Kirchner han hecho caso al espíritu sugerido por mí, ya que cada uno en su momento dictaron leyes que mejoraron la distribución de la riqueza y la participación de la clase trabajadora en la renta total del país.

F: Permítame interrumpirle maestro, pero aquí vemos algo que se asemeja a un comportamiento psicológico bastante bien descripto por mí, especialmente en “Inhibición, Síntoma y Angustia” de 1925. Déjenme incorporar esto a la charla, puesto que la Economía es una Ciencia Social, dado que la manejan hombres y, hasta donde yo sé, todos tenemos la misma constitución biológica, orgánica y neurológica.

La lógica es la de la neurosis obsesiva. Fíjense ustedes que las conductas van avanzando de manera progresiva, son llevadas a cabo por el mismo sujeto y, sin embargo, éste queda preso tanto de la ausencia de energética suficiente para manejarlo, como de su aislamiento cada vez mayor. Es que la batería de rituales que un neurótico obsesivo efectúa, así como las excusas que pone un temeroso e inseguro que, invadido por sus miedos, no sale al encuentro con los demás y al desafío, sólo son perdonados por sí mismos a través de las excusas y justificaciones racionales. Pero aquí se aparece el peor enemigo, que es la inteligencia. Esto es el orgullo por la propia inteligencia para justificar lo que desde fuera es injustificable. El sujeto se vuelve orgulloso de ésta inusual capacidad intelectual, casi al punto de tener erogenizado su intelecto. Todo mentira. Pero eso es lo que le hace sentir seguridad. Ésa seguridad que en el libre intercambio con los demás no tiene, ésa seguridad que sin completar sus rutinas obsesivas no tiene.

Para peor, la lógica de los miedos, las inseguridades y la neurosis obsesiva no es de quietud. Son algo que avanza. Las rutinas obsesivas que le hacen sentir seguridad y protección al sujeto avanzan sobre cada vez más espacios de su vida, los miedos y las inseguridades se interponen en cada vez más actividades, y el sujeto termina cada vez más aislado, cada vez con menos relaciones sociales, cada vez con menos actividades, preso de sí mismo. Es un muro que va levantando el sujeto entre sí mismo y el mundo que está fuera. Queda detrás de la pared, como tan claramente lo describiera Roger Waters en su obra de 1979 “Pink Floyd The Wall”.

Yo veo que la lógica de acumulación infinita que usted describe Marx, es similar a éste comportamiento de las enfermedades. No tiene límite. Aunque mientras éstas enfermedades explicadas por mí, tienen como víctima al propio sujeto, que las padece y no puede manejarlas, la enfermedad de la acumulación de poder en el capitalismo, tiene como víctima al pueblo, a una nación que participa cada vez de un porcentaje menor de la riqueza total, que se concentra progresivamente cada vez más en cada vez menos manos. Y llegamos al punto de que sólo 70 personas tienen en el mundo en el siglo XXI igual cantidad de riqueza que la mitad de la población terrestre, o sea, 3500 millones de personas. Una injusticia total que debería ser reivindicada. Apoyo entonces la intervención de Estados que conducen hacia una mayor equidad distributiva, lo que Perón ha denominado “Justicia Social”.

M: Gracias Sigmund por tu colaboración.

Continúo entonces, la ola especulativa resultante a partir de la devaluación de enero del 2014, redundó en un alza de precios muy fuerte. Siendo más específico, la devaluación de aproximadamente 20% produjo un alza de algunos precios de más del 50%. Obviamente, queda a la vista que los incrementos de precios tuvieron mayor fuerza por motivos especulativos que por motivos relacionados con los incrementos de costos de los bienes importados.

Ciertamente, la posibilidad que tuvieron los empresarios para subir desmedidamente los precios tuvo cabida porque el poder adquisitivo de la clase trabajadora, de la clase media en general y de la mayoría de la población, se halla en niveles relativamente elevados, como consecuencia de doce años de Políticas Económicas desarrolladas por el Gobierno Kirchnerista, que mejoraron significativamente la distribución de la riqueza incrementando sustancialmente el nivel de vida y las posibilidades de compra de la población en general. Recontra Marxista en éste sentido! Resultantemente, las Demandas son menos Elásticas, puesto que si la gente tiene plata es menos sensible a dejar de comprar cuando suben los precios, y por ello los empresarios aprovecharon para subir desmedidamente los precios de los distintos bienes.

Pero por supuesto, para no olvidar sino para destacar y tener siempre presente, el rol de los medios de comunicación fue también central en ésta cuestión. Tal es así, que se ha presenciado un ataque constante a través de los medios de comunicación hegemónicos, que son los manejados por el poder fáctico del país, induciendo a las empresas a subir los precios e intentando atemorizar a todo el pueblo argentino acerca de una inminente desestabilización del Gobierno Nacional, sugiriendo la idea de que el proceso inflacionario se le había ido de control, como ocurriera durante los gobiernos de Frondizi (1958-62), Isabel Perón (1974-76), Martínez de Hoz (1976-83), Raúl Alfonsín (1983-89) y los primeros dos años del gobierno de Carlos Menem desde 1989 hasta el momento en que se implanta el Modelo de la Convertibilidad en el año 1991. Es necesario recordar que las tasas de inflación de éstos períodos mencionados de desestabilización monetaria superaron el 2200% anual (30% mensual). Para comparar, hoy en la Argentina hay cerca de un 30% anual (2% mensual).

Pero fue urgente que el Estado intervenga para controlar ésta situación, porque tal como ya fue explicado, si la Economía es dejada en libertad, los que tienen el poder no van a dejar de enriquecerse a expensas de empobrecer al pueblo, a la nación y especialmente a las clases postergadas.

Bueno, todo esto fue controlado por el Gobierno mediante distintas estrategias. Por un lado, se consiguió volver a manejar la Política Cambiaria, de modo que los exportadores ya dejaron de manejarla. Y, por otro lado, el “Programa de Precios Cuidados”. Ésta política de estabilidad de precios constituye una innovadora estrategia implementada por el gobierno nacional para hacer frente a grupos económicos concentrados que aprovechan la mayor capacidad adquisitiva de buena parte de la población para incrementar sus márgenes de rentabilidad.

De hecho, frente al incremento del precio de los alimentos del 4% promedio a nivel mundial para el primer cuatrimestre de éste año 2014, y para que no ejerzan presión sobre los menos favorecidos, el Banco Mundial alerta al mundo que la vigilancia de los precios de los alimentos no sólo es importante por razones de seguridad alimentaria y bienestar, sino porque pueden causar graves enfrentamientos e inestabilidad política. Es de destacar que las políticas recomendadas por el propio Banco Mundial coinciden con los objetivos del programa nacional Precios Cuidados, vigente actualmente en Argentina, en donde se ha comprobado que seis de cada diez argentinos utilizan ésta herramienta para cuidar el bolsillo, consolidando la efectividad de la Política de “Precios Cuidados”. A tal punto es así, que desde su implementación los precios bajaron casi 3 puntos porcentuales, luego de la escalada inicial que habían tenido a partir de la devaluación de enero. De hecho, obsérvese que la FAO (Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) ubicó a la Argentina como uno de los países que más redujo su inflación en alimentos.

N: Es que el problema más grave de la inflación, es cuando en la puja distributiva, la mayor apropiación de riqueza la hace la clase dominante, perjudicando a los que menos tienen. De acuerdo con vos Karl, apoyo tu explicación. En la Argentina se viene dando, durante todo el ciclo kirchnerista, una mejora en la distribución de la riqueza con un mejoramiento importante del poder adquisitivo de la clase trabajadora y una creciente participación de la clase media en la riqueza total del país, sólo a excepción del primer semestre del 2014 en donde se sufrieron las consecuencias de un intento de golpe económico desestabilizador efectuado por el poder fáctico. No podemos creer cualquier cosa que nos inventan los medios de comunicación. Inventar fábulas acerca de otro mundo distinto de éste no tiene sentido, presuponiendo que no domine en nosotros un instinto de calumnia, de empequeñecimiento, de recelo frente a la vida: en este último caso tomamos venganza de la vida con la fantasmagoría de otra vida distinta de esta, mejor que esta, dividiendo el mundo en un mundo verdadero y en un mundo aparente. Basta de tantas mentiras por favor!

Y: Amiguitos del universo, vamos bárbaro, así que pasemos al punto siguiente: Ajuste.

F: Uff, qué tema tan interesante. Ajuste significa reducción, empequeñecimiento, achicamiento. Cuando un sujeto no puede domeñar una importante serie de cuestiones que le impiden desarrollarse, sucede lo que nos trae Roger Waters en Pink Floyd The Wall, su obra cumbre de 1979. El muro representa el conjunto de miedos e inseguridades que hay que derribar para poder vivir una vida plena con sentido. Si un pobre sujeto no puede derribarlos, quedará aislado de la realidad, detrás de la pared. No podemos eludir la impresión de que el hombre suele aplicar cánones falsos en sus apreciaciones, pues mientras anhela para sí y admira en los demás el poderío, el éxito y la riqueza, menosprecia, en cambio, los valores genuinos que la vida le ofrece. En la medida que uno queda preso de sus pulsiones, su Yo se empequeñece y su vitalidad se reduce. A nivel país, podemos ver el caso argentino. Desde el 24 de marzo de 1976, Argentina fue sometida a un calvario institucional, político y económico que la marginó hasta convertirse en un pobre país agroexportador con una industria desmantelada, saqueada financieramente, con un aparato productivo extranjerizado, y tributando permanentemente al exterior con una deuda externa que nos vivió asfixiando sin tregua hasta elevar nuestra pobreza hasta el 50% de nuestra población.

Para financiar los constantes déficits comercial y fiscal durante el período que va desde 1976 hasta el 2001, el país tuvo que recurrir al endeudamiento externo. De éste modo, los acreedores externos nos imponían condiciones cada vez que les pedíamos dinero. Éstas eran achicar el Gasto del Gobierno dedicado a desarrollo, infraestructura, salud, vivienda, educación, jubilaciones, sueldos, y demás, en pos de aumentar las partidas destinadas al pago de deuda. Esto es lo que se llama “Ajuste”. Pero achicar la Inversión Social del Estado resulta rápidamente en una contracción del nivel de actividad y empleo, que reduce el consumo y las ganancias empresariales, lo que por lo tanto reduce a su vez la recaudación del Estado proveniente de Impuestos al Consumo y de Impuestos a las Ganancias, que tienen una relación directa con el nivel de actividad. Es decir, las políticas planeadas por las oligarquías nacionales aliadas con el imperialismo foráneo acabaron destruyendo el país, que terminó quebrando en diciembre del 2001.

A mi juicio, ha de contarse con el hecho de que todos los hombres integran tendencias destructoras – antisociales y anticulturales – y que en gran número son bastante poderosas para determinar su conducta en la sociedad humana. Éste hecho psicológico presenta un sentido decisivo para el enjuiciamiento de la cultura humana. En un principio pudimos creer que su función esencial era el dominio de la Naturaleza para la conquista de los bienes vitales y que los peligros que la amenazan podían ser evitados por medio de una adecuada distribución de dichos bienes entre los hombres. Mas ahora vemos desplazado el nódulo de la cuestión desde lo material a lo anímico. Lo decisivo está en si es posible aminorar, y en qué medida, los sacrificios impuestos a los hombres en cuanto a la renuncia a la satisfacción de sus instintos, conciliarlos con aquellos que continúen siendo necesarios y compensarles de ellos.

La necesidad de una coerción que imponga la labor cultural, no es por sí misma sino una consecuencia de la existencia de instituciones culturales defectuosas que han exasperado a los hombres haciéndolos vengativos e inasequibles. Nuevas generaciones, educadas con amor y en la más alta estimación del pensamiento, que hayan experimentado desde muy temprano los beneficios de la cultura, adoptarán también una distinta actitud ante ella, la considerarán como su más preciado patrimonio y estarán dispuestas a realizar todos aquellos sacrificios necesarios para su perduración, tanto en trabajo como en renuncia a la satisfacción de instintos. Harán innecesaria la coerción y se diferenciarán muy poco de sus conductores. Si hasta ahora no ha habido en  ninguna cultura colectividades humanas de esta condición, ello se debe a que ninguna cultura ha acertado aún con instituciones capaces de influir sobre los hombres en tal sentido y precisamente desde su infancia.

Podemos preguntarnos si nuestro dominio sobre la Naturaleza permite ya, o permitirá algún día, el establecimiento de semejantes instituciones culturales, e igualmente de dónde habrán de surgir aquellos hombres superiores, prudentes y desinteresados que hayan de actuar como conductores de las masas y educadores de generaciones futuras.

Con todo esto me siento indignado cuando los mismos que a principios de éste año acusaban al gobierno de incrementar demasiado el gasto público (40%), ahora lo acusan de estar haciendo un ajuste. A principios de año decían que el excesivo gasto público generaría una terrible inflación. Luego del golpe económico impulsado por los exportadores, poder financiero, corporaciones de empresas multinacionales y la supervisión del imperialismo norteamericano, en donde los salarios ya no pudieron subir tanto como los precios, por primera vez en once años, acusan al gobierno nacional de estar aplicando un ajuste.

Lo que yo veo aquí mis queridos amigos, es que aún los que se adjudican ser de la izquierda, están siendo funcionales al poder de la derecha, dando la razón a la Presidente Cristina Fernández, cuando alertó sobre que tengan cuidado esos que se dicen de izquierda, porque como la Tierra es redonda, no sea cosa de que por irse tanto hacia la izquierda salgan por el otro lado y aparezcan junto con la derecha.

Y, por cierto, me apena que tanta gente no se dé cuenta!

M: Parecés Marxista mi querido Sigmund! Excelente! Bravo!

N: Yo los veo a ambos Nietzchianos… porque no se comen nada de lo que les venden, ven la realidad… jaja

Y: Genios totales! Me encanta cómo va esto! Me falta que me hablen del impuesto a las ganancias, acuerdo con el club de parís y la invitación a la Argentina por parte del BRICS

M: Brevemente. Y continuando con la idea de que el Estado tiene que intervenir en la economía para equilibrar la matriz de distribución de la riqueza, distinguiremos entre impuestos progresivos y regresivos. Los impuestos progresivos son aquellos en los que más paga el que más tiene, como el Impuesto a las Ganancias, en tanto que los regresivos más los sufre el que menos tiene, como el Impuesto al Consumo, ya que si en la cola del supermercado hay un rico y un pobre con la misma mercadería, que paga el mismo impuesto, más lo sufre el que menos tiene. Entonces, si se quiere mejorar la progresividad de la estructura tributaria del país, mejor que aumenten los impuestos progresivos y que disminuyan los regresivos.

Y aquí de nuevo, los que utilizaron los medios de comunicación para atacar al kirchnerismo con el cuento de que era necesario subir el mínimo no imponible de impuestos a las ganancias, para que deje de pagarlo aquella parte de la clase trabajadora que más gana, justificando que el salario no es ganancia, no hicieron otra cosa que ir en contra del propio pueblo y en contra de la financiación del Estado.

Por un lado, si se gana tanto como para pagar Impuesto a las Ganancias, entonces ésos que pagan están bastante bien en términos relativos, a tal punto que quienes no ganan lo suficiente como para alcanzar el mínimo no imponible desearían alcanzarlo y pagar, antes que tener un ingreso menor a ése límite inferior.

Estamos hablando del porcentaje de la clase trabajadora que mejor está, que cambia el auto cuando quiere y que se va de vacaciones dos o tres veces por año, tanto dentro del país como al exterior. Así que no deberían dejar de colaborar con quienes sí lo necesitan. Pero además, éstos sectores sociales son los que ahorran, de lo que se desprende que si dejan de pagar el impuesto no lo van a usar para consumir, como sí lo hacen los sectores más postergados, que son precisamente los que necesitan ayuda. En suma, se estaría desfinanciando al Estado y por ende al País. Como dice Nietzche, Basta de Mentiras!

F: Déjenme a mí con esto de los medios y la transmisión a las masas que es mi especialización. He sabido que por los medios de comunicación manejados por el poder hegemónico, han salido a decir que el Ministro de Economía Axel Kicillof pateó el pago de deuda con el Club de París para que lo pague el gobierno que asuma en el 2015. Pero qué es lo que habrá de pagarse?

La Deuda Externa Argentina fue inventada y multiplicada desde marzo de 1976 hasta diciembre del 2001. Este fue el único gobierno que desde entonces no sólo que no contrajo deuda sino que la bajó desde 220000 millones a 80000 millones de dólares. Pero además arreglando tasas de interés preferenciales por haber mantenido el cumplimiento estricto de todos los compromisos financieros desde que asumió, y acordando además inversiones extranjeras en el período de pago, que por cierto son generadoras de empleo.

Al mismo tiempo, Argentina fue invitada a sumarse al BRICS, que significa una integración de Política Económica ente los seis países emergentes con mayor dinámica de desarrollo del mundo, que son Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica y ahora Argentina también. Este acuerdo, además, conseguirá un importante caudal de inversiones y de acuerdos comerciales que impactarán positivamente en el nivel de actividad y empleo del país, ya que el BRICS es casi la mitad de la población mundial y la cuarta parte del producto mundial. Y no olvidemos que Argentina además es socia de Brasil en el UNASUR y la CELAC, que son las dos integraciones de Política Económica de América Latina creadas por todos los gobiernos revolucionarios del continente, cuyos héroes en éste sentido fueron Hugo Chávez, Néstor Kirchner, Lula Da Silva, Evo Morales, Rafael Correas y Pepe Mujica.

Por último, sabemos también que finalmente hemos llegado a un acuerdo automotriz con Brasil, demostrando que el MERCOSUR está vivo, de pie y va para delante!

Entonces, sabiendo que tanto la inversión como el consumo dependen de las expectativas, y que mucho de las expectativas son generadas por los medios de comunicación, deberemos ser optimistas porque todas éstas son buenas noticias que van a impactar favorablemente sobre el nivel de actividad y empleo, cosa que se traduce inmediatamente en una mejora en la distribución de la riqueza, volviéndola más equitativa y con mayor inclusión social.

Complemento algunas de las cuestiones antes mencionadas, sosteniendo que conviene difundir éstas buenas noticias, ya que por lógica no lo hacen los medios hegemónicos manejados por el poder. El objetivo es generar buenas expectativas, para que se incrementen las decisiones de inversión y consumo, que luego redundan en un ciclo expansivo de crecimiento con inclusión social y mejora distributiva, lo que va camino a la Justicia Social.

Y: Bueno mis amigos, muchas gracias por el aporte. Deseo que sirva mucho para el futuro!

No imaginan cuán importante es esto, y tal vez tampoco pueda entender yo en éste momento las implicancias que tiene con vistas a un futuro que se monte sobre la revolución cultural que ya está en marcha!

Bueno, los dormí y los mandé de vuelta al pasado, para qué iba a seguir saludándolos si está todo programado para que no se acuerden nada de esto?

Ja ja! Nos vemos pronto amigos!

Seguimos en contacto!!!!!

Julián Denaro

13 de junio de 2014

https://www.facebook.com/EconomiaPoliticaConJusticiaSocial

JULIÁN DENARO (1976) es Profesor Adjunto en la Universidad de Buenos Aires, Universidad de Belgrano, Universidades Nacionales del Oeste y de La Matanza, es autor de las obras “LOS PROBLEMAS DE LA MACROECONOMÍA” publicada en 2008, “LOS OBJETIVOS DE LA MICROECONOMÍA” publicada en 2013, “ECONOMÍA POLÍTICA CON JUSTICIA SOCIAL” publicada en 2013 y “MACROECONOMÍA PARA EL CRECIMIENTO INCLUSIVO” publicada en 2015. Dicta conferencias y cursos para Graduados, está próximo a publicar su quinto libro y es estudiante avanzado de la Licenciatura en Psicología en la Universidad de Buenos Aires.

 

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