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La Patria, la Plaza y el Pueblo (Por Ramón Vallejos)

El 24 de marzo de 2016, con las más de 400 mil personas en la Plaza de Mayo y muchos miles más en otras ciudades de la Argentina recordando la mutilación genocida de la dictadura civil-militar de 1976, quedará en la historia, como el comienzo de una nueva etapa de resistencia de los trabajadores, jubilados, cuentapropistas, jóvenes, hombres y mujeres. 

El Pueblo en general, rechaza el ajuste brutal del poder económico, que llegó al gobierno actual prometiendo "la revolución de la alegría", con globitos y baile pavote de MM, que muchos incautos compraron, a través de los medios hegemónicos, que son parte del mismo proceso de enajenación de los recursos de los argentinos hacia los sectores económicos-financieros más poderosos del país y del mundo, entre ellos los buitres.

Proceso que se está llevando a cabo con la complicidad manifiesta de muchos legisladores que traicionan la voluntad popular de los votos que los llevaron al Congreso Nacional, así como otros, gobernadores de provincia, que incumplen con el mandato que les confirió el pueblo con su voto, a los cuales se repudió totalmente, por su actitud de defección, cobardía y deslealtad.

En virtud de su juramento por Dios y La Patria, El Pueblo les reclama, que cumplan con los objetivos de defensa de las banderas del modelo, que son las de La Patria misma, por el cual fueron elegidos.

La Patria no se construye con pusilánimes, cobardes o traidores, quienes jamás pasarán a la historia. "Por tus hechos seréis recordados".

“Los trabajadores fuimos los más golpeados por la dictadura. Las políticas que el poder económico les dictó a los genocidas fueron muy similares a las que aplica este gobierno”, (el de MM), dijeron todos los sindicatos que poblaban la marcha.

A la marea humana que se movilizó este memorable día de recordación, memoria, verdad y justicia, con parámetros históricos, actuales y futuros, "no la para nadie", en función de no perder los beneficios logrados en los últimos 12 años del Proyecto Nacional, Popular y Democrático que supimos conseguir, y afianzar: los derechos humanos, el trabajo, salarios dignos, jubilación acorde, niñez con alegría, sin penurias, la consolidación de la movilidad social, la cultura, la educación libre y gratuita, la ciencia y tecnología, la industria nacional, contra la pobreza y la desocupación.

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