La decisión del Gobierno de no enviar aportes adicionales agravó la crisis, en la Planta de Agua Pesada

Con argumentos similares, la historia se vuelve a repetir para los empleados de la Planta de Agua Pesada (PIAP). Como ocurrió en 1995 y el 2000, la gerencia resolvió reducir la cantidad de obreros que van hasta Arroyito, para llevar los gastos de funcionamiento a su más mínima expresión. Luego de que Nación informó que “no van a haber más aportes del tesoro nacional” buscan ahorrarse los gastos de comida y alquiler de colectivos que, de lunes a viernes, llevan el personal hasta la planta.

El responsable de Relaciones Institucionales de la Empresa Neuquina de Servicios de Ingeniería S.E. (ENSI), Ignacio Maffei dijo que la planta está parada esperando ponerse en marcha en el segundo semestre del año.

“Durante todo el primer semestre vamos a estar sin producción, por lo que para que podamos llegar al segundo semestre manteniendo a todo el personal, tengamos que hacer algunos recortes”, expresó Maffei. Y aclaró que cuando se habla de recortes no se refiere a lo salarial, “pero sí en los costos que tenemos internos por funcionamiento”.

Explicó que “para minimizar gastos, el personal que no esté abocado a cumplir tareas de conservación de la planta va a estar en una situación de ‘stand by’ que significa en sus hogares y va a ser hasta el segundo semestre”. Esta iniciativa está pensada para aplicarse en turnos rotativos, por lo que nadie va a estar hasta septiembre sin ir a la planta, se van a ir turnando.

La PIAP tiene un gasto aproximado de 60 millones mensuales, de los cuales el 68% corresponde al costo del personal, que abarca sueldos, indumentaria, obra social e impuestos, entre otros. El 14% representan los gastos de transporte y comida; 11% en energía y gas. Y el restante 7% está destinado para el mantenimiento de la planta.

Para tener una dimensión, si la empresa saca dos colectivos y cuatro camionetas del transporte de empleados se ahorraría mensualmente entre 1,6 y 1,8 millones de pesos.

“Esto de esperar hasta el segundo semestre tiene que ver con la espera del contrato de la cuarta y quinta central que según se habla se van a avanzar en los próximos meses”, indicó Maffei. Y agregó que “la idea es que se hagan 600 toneladas para el proyecto de la cuarta central de generación nucleoeléctrica y 300 más para stock de las centrales”.

“Nosotros lo que buscamos es poder autoabastecernos”, enfatizaron desde la ENSI, en referencia a los recortes.

back to top