Grecia: Segundo día de huelga en contra de nuevos ajustes

Los sindicatos griegos convocaron hoy un  segundo día de huelga como protesta por el nuevo programa de ajustes  con recortes a las pensiones que planea el Gobierno.       

El principal efecto fue la paralización del transporte: no funcionó la mayoría de los ferries a las islas del Egeo, como tampoco los trenes ni el transporte de cercanías en Atenas y otras ciudades. También la prensa se declaró en huelga por dos días, por lo que en la  radio y televisión hoy sólo se emitían música y películas.       

En el Parlamento comenzó entretanto un debate de dos días sobre el nuevo paquete de medidas de austeridad. La votación está prevista  para la noche del domingo.       

Además de recortes en las pensiones por un valor de 1.800 millones de euros, las medidas prevén un aumento de impuestos de otros 1.800  millones, a los que más adelante se le añadirán otros 1.800 millones mediante el aumento de los impuestos indirectos. Los sindicatos convocaron para esta tarde y el domingo manifestaciones.       

Los sindicatos calificaron los recortes en las pensiones como "la  tumba" del sistema jubilatorio. Desde que comenzó la grave crisis  financiera en Grecia hace seis años, las pensiones han sido  recortadas en 12 ocasiones, pese a lo cual el sistema sigue siendo  inestable.       

De los aproximadamente 11 millones de habitantes del país, 1,2 millones no tienen trabajo y sólo están empleados casi 3,6 millones, de los cuales muchos ganan menos de 500 euros al mes. Casi 2,7 millones de personas están jubiladas. El primer ministro griego, Alexis Tsipras, ya ha alertado de que el sistema colapsará dentro de pocos años a menos que haya reformas.         

El nuevo paquete de medidas prevé asimismo un aumento considerable del impuesto sobre la renta. El máximo no imponible bajará de 9.545 a 8.636 euros, pese a que el ministro de Finanzas, Euclides Tsakalotos, había dicho hace sólo tres semanas que no aceptaría reducir esa cifra por debajo de los 9.100 euros, algo que era "una línea roja".       

A su vez, las empresas pequeñas que tengan ganancias de hasta 50.000 euros tendrán que pagar un 29 por ciento de impuestos en vez del 26 por ciento que tributaban hasta ahora.       

La votación es una prueba de fuerza para la coalición de  izquierda-derecha que encabeza Tsipras y que cuenta con una estrecha  mayoría de 153 de los 300 diputados. Los recortes son una exigencia  para que Grecia siga recibiendo ayudas financieras.       

Pero si Tsipras sobrevive a esta prueba, enseguida tendrá la siguiente: el lunes se reúne el Eurogrupo (los ministros de Finanzas  de los países de la eurozona), y el tiempo vuelve a correr en contra  de Grecia, pues en julio tiene que pagar 3.700 millones de euros al Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europeo (BCE) y otros acreedores.       

Atenas no tiene estos fondos a menos que se liberen las ayudas del tercer rescate, aprobado en principio a mediados de 2015. Grecia lleva siendo apoyada desde 2010 con créditos internacionales para  evitar que entre en cesación de pagos.       
Numerosos analistas vaticinaban este fin de semana en Atenas que habrá elecciones anticipadas en Grecia si Tsipras no obtiene una mayoría. Pero también podrían producirse si el lunes los acreedores  no se ponen de acuerdo sobre cómo seguir adelante.       

El FMI exige un paquete de recortes "de contingencia" por valor de otros 3.600 millones de euros, algo que rechaza el ministro Tsakalotos. Asimismo, el Fondo pide aliviar la deuda externa griega, por ejemplo ampliando el calendario de los pagos.(dpa)

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