Adolfo Pérez Esquivel afirmó que "la religión puede aportar muchísimo a la paz y la unión del país"

El premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, afirmó hoy que "la religión puede aportar muchísimo a la paz y la unión del país", y aseguró que "no se puede construir sobre el odio", al participar de la conmemoración el Día de la Libertad Religiosa organizada por la Secretaría de Culto de la Nación.

La ceremonia, bajo el lema "Argentina unida por la construcción de una paz duradera", comenzó a las 18.30 en el salón Libertador del Palacio San Martín y estuvo encabezada por el secretario de Culto, Guillermo Oliveri, acompañado por Pérez Esquivel, además de representantes y líderes religiosos de las diferentes confesiones del país, quienes pronunciaron una oración por la paz.

En diálogo con Télam, el premio Nobel consideró que "la fuerza de la oración de las religiones puede cambiar mucho las cosas en un mundo de guerras y desencuentro".

En cuanto a la actualidad argentina, señaló que "la unidad de la religión en sus distintas perspectivas puede aportar muchísimo a la paz y la unión del país".

Sobre los discursos de odio, Pérez Esquivel marcó la necesidad de "contrarrestarlos a través de el testimonio, el ejemplo" y mencionó "el ataque muy fuerte" contra la recientemente fallecida Madre de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, a quien consideró "una luchadora que ha trabajado y ha buscado verdad y justicia en la reparación del daño hecho".

También indicó que "los discursos de odio dañan a los mismos que lo generan, porque no se puede construir sobre el odio" y propuso "tener una mente positiva, en la unidad y la diversidad porque no es necesario que todos pensemos igual, pero sí podemos compartir la paz".

El secretario de Culto, Guillermo Oliveri, dio inicio a la ceremonia y aseguró que "el Estado junto con las confesiones religiosas" son quienes deben "trabajar para achicar la grieta en el país que se agranda cada vez más".

El funcionario destacó la "fuerza del diálogo interrelogioso" como la mejor forma para "cerrar la grieta, evitar el odio en las redes, en la prensa y combatir la rivalidad".

En tanto, en su discurso, Perez Esquivel celebró el encuentro de las religiones "en la diversidad" y afirmó que "muchas veces la intolerancia nos impide compartir lo más valioso que tenemos, que es la paz concreta, constructiva y en la defensa de los derechos humanos".

Previo a la ceremonia, se plantaron dos olivos en el jardín de los cardenales donde está emplazado un fragmento del Muro de Berlín donado por el Gobierno de Alemania. Luego de las primeras palabras y la lectura de la declaración conjunta, los lideres religiosos convocados hicieron, uno a la vez, una breve oración por la paz de acuerdo a su culto.

En representación de las diferentes confesiones, asistieron monseñor Oscar Vicente Ojea, titular de la Conferencia Episcopal Argentina; Iosif Bosch, arzobispo de la Iglesia Ortodoxa Griega; y monseñor Santiago El Khoury, arzobispo de la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa de Antioquia en Argentina.

También asistieron el arzobispo Crisóstomo Juan Gassali, de la Iglesia Siriana Ortodoxa de Antioquía; el Gran Rabino Eliahu Hamra; el Gran Rabino Isaac Sacca de la Comunidad Sefardí de Buenos Aires; y el reverendo Obispo Juan de Caracas de la Iglesia Ortodoxa Rusa en la Argentina, entre otras autoridades y líderes religiosos.

back to top